Umberto Agnelli
Industrial italiano
Umberto Agnelli nació el 1 de noviembre de 1934 en Lausanne (Suiza). Fue el menor de siete hermanos.
Licenciado en Derecho por la Universidad de Turín.
De inmediato comenzó a trabajar en Fiat, donde en 1968 fue nombrado director de las actividades internacionales y poco después pasó a ser el "número tres" de la compañía. Cuando contaba 22 años, asumió su primer cargo de responsabilidad al convertirse en presidente de la Juventus de Turín, el club de fútbol más laureado de Italia y uno de los santos y señas de la familia Agnelli.
Antes, el 15 de junio de 1959, se había casado con Antonella Bechi Piaggio, de la familia que "inventó" la famosa Vespa, con la que tuvo un hijo, Giovanni Alberto, designado a los 33 años sucesor del patrón Giovanni Agnelli, aunque un cáncer repentino acabó con su vida en 1997. Tras divorciarse, en 1974 se casó en secreto con Allegra Caracciolo di Castagneto, prima de la esposa de su hermano Giovanni, con la que tuvo dos hijos, Andrea y Anna.
En 1976, años de terrorismo y tensión en las fábricas de Fiat, de nuevo a la sombra de su hermano que era el elegido, se aventuró en la vida política y resultó elegido senador por la Democracia Cristiana, cargo que ocupó hasta 1979. El 18 de diciembre de 1987, su hermano el "Avvocato" Agnelli anunció ante 150 directivos que su heredero sería Umberto, que ya era vicepresidente de la compañía, pero todo quedó en una declaración de intenciones que luego no se materializó. Más tarde, el elegido fue su hijo Giovanni Alberto, pero el cáncer volvió a dictar su ley en la familia, que pasó el testigo, que ahora le pertenece al nieto de Giovanni Agnelli, John Elkan.
En sus últimos años de convivencia con su hermano y patrón de la compañía, Umberto se ocupó de forma particular de las dos sociedades familiares, IFI e IFIL, depositarias del 30 por ciento de las acciones de control de Fiat. Su "vuelta" a la compañía se produjo tras la muerte de Giovanni Agnelli el 24 de enero de 2003, cuando las distintas ramas de la dinastía cumplieron los deseos del fallecido y le nombraron presidente de la sociedad familiar.
Atravesaba entonces Fiat por la crisis más grave de su historia, con una caída en picado de las ventas sin precedentes que llenaban sus cuentas de pérdidas y deudas millonarias, que cubrían de nubarrones el futuro de la compañía. A Umberto Agnelli le tocó dirigir la fase de saneamiento, que conllevó la venta de muchos de sus activos financieros y la apuesta de nuevo por el que fue su primer negocio: la fabricación de automóviles, que marcó la salida del túnel.
Umberto Agnelli falleció el 27 de mayo de 2004 en su casa de Mandria, cerca de Turín, tras una larga batalla contra el cáncer.
